Pero tú habla lo que está de acuerdo con la sana doctrina. Tito 2:1.Para hablar de acuerdo a la sana doctrina tenemos que conocer el significado de la palabra sostener que según el Diccionario la palabra sostener significa mantener una cosa o confirmar una posición y Sustentar o mantener firme algo, sinónimo: defender, mantener, afirmar, proteger, Viene del Latín: Sustinere. Hoy, todo lo novedoso cautiva, y eso produce grandes vientos de nuevas doctrinas casi siempre falsas. Por eso tenemos que estar en permanente vigilia para que Satanás no introduzca enseñanzas perturbadoras que aflijan al cuerpo de Cristo. Es menester poner énfasis en nuestra sana doctrina Pentecostal; como principio de lo que realmente somos y que hemos fijado parámetro doctrinal que nos alinea con la verdad expresada en ella misma y a cotejada por las siguientes verdades que ellas mismas defiende y sostiene expresadas en lo siguiente:
1) Por lo tanto, la doctrina constituye el factor esencial de unidad de la iglesia del Señor y su fundamento. Si la desechamos, destruimos esa unidad y agrietamos el basamento de la fe.
2) La fe cristiana no es el resultado de la especulación humana, sino de la revelación de Dios. Él ha hablado, y en las Sagradas Escrituras tenemos toda su revelación para el hombre. Esto constituye el tesoro más valioso del cristiano, la "sana doctrina" a la que debemos ajustarnos: "Pero tú habla lo que está de acuerdo con la sana doctrina". (Tito. 2:1).
3) De la raíz del calificativo sana, que se aplica en griego a la doctrina, proviene nuestra palabra higiene, es decir, saludable, que proporciona salud espiritual. Por tanto, la doctrina de los apóstoles es la base de la salud espiritual del pueblo de Dios y de los ministros del santuario que debe enseñarla tal como ella nos indica.
4) ¿Cómo saber que una doctrina es sana? Hay una sola manera: remitirnos a la Palabra de Dios. Todo el sano consejo de Dios está revelado en ella. Si la obedecemos, ciertamente estaremos en la sana doctrina. Si nuestra predicación se basa en la Palabra de Dios estamos enseñando la sana doctrina. Las Escrituras no son para respaldar nuestras propias ideas. Es verdad que muchas interpretaciones han producido algunas parcelas en el pueblo de Dios y el ministerio, pero son cuestiones secundarias y no deberían afectar nunca la comunión cristiana. Sin embargo, el fundamento doctrinal debe ser firme. Debemos ser incondicionales de la Palabra de Dios, nuestra doctrina tiene que ser clara y fluir directamente de las Sagradas Escrituras. Así que, hermanos, estad firmes, y retened la doctrina que habéis aprendido, sea por palabra, o por carta nuestra. 2 Tesalonicenses 2:15
5) "Compra la verdad, y no la vendas" (Proverbios. 23:23), dice el sabio. Aferrarse a la verdad bíblica no es quedarse en el pasado; es situarse en la eternidad; porque la sana doctrina del Señor de los apóstoles no es antigua, es eterna. Es nuestra responsabilidad ante el Señor proclamar esta verdad a nuestra generación y a las venideras, a cualquier precio.
6) Nuestro tiempo es particularmente proclive a generar cada vez más doctrinas enfermizas,heréticas y apóstatas. No debe extrañarnos: "Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y doctrinas de demonios" (1 Ti. 4:1); "Porque vendrán tiempos cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias"
(2 Ti. 4:3).
Cual es nuestra actitud como ministros del santuario es defender y de mantener nuestra posición doctrinal en cuanto a todo el viento contrario que venga para hacernos salir de la verdad que hemos adquirido. Ya que cómo pentecostales que somos debemos mantener la doctrinas verdadera con el ardiente fuego del Espíritu Santo en nuestros corazones para hacer conocer la verdad. Que en esto 62 años cómo distrito del centro hemos sostenido el timón de la Sana doctrina con el fuego vivo del Espíritu Santo para que nuevas generaciones de ministros sigan nuestras pisadas y mantengan y sostenga en alto la sana doctrina Pentecostal.
Dios les Bendiga...
Revdo. Altino Guerra.
Pastor
1) Por lo tanto, la doctrina constituye el factor esencial de unidad de la iglesia del Señor y su fundamento. Si la desechamos, destruimos esa unidad y agrietamos el basamento de la fe.
2) La fe cristiana no es el resultado de la especulación humana, sino de la revelación de Dios. Él ha hablado, y en las Sagradas Escrituras tenemos toda su revelación para el hombre. Esto constituye el tesoro más valioso del cristiano, la "sana doctrina" a la que debemos ajustarnos: "Pero tú habla lo que está de acuerdo con la sana doctrina". (Tito. 2:1).
3) De la raíz del calificativo sana, que se aplica en griego a la doctrina, proviene nuestra palabra higiene, es decir, saludable, que proporciona salud espiritual. Por tanto, la doctrina de los apóstoles es la base de la salud espiritual del pueblo de Dios y de los ministros del santuario que debe enseñarla tal como ella nos indica.
4) ¿Cómo saber que una doctrina es sana? Hay una sola manera: remitirnos a la Palabra de Dios. Todo el sano consejo de Dios está revelado en ella. Si la obedecemos, ciertamente estaremos en la sana doctrina. Si nuestra predicación se basa en la Palabra de Dios estamos enseñando la sana doctrina. Las Escrituras no son para respaldar nuestras propias ideas. Es verdad que muchas interpretaciones han producido algunas parcelas en el pueblo de Dios y el ministerio, pero son cuestiones secundarias y no deberían afectar nunca la comunión cristiana. Sin embargo, el fundamento doctrinal debe ser firme. Debemos ser incondicionales de la Palabra de Dios, nuestra doctrina tiene que ser clara y fluir directamente de las Sagradas Escrituras. Así que, hermanos, estad firmes, y retened la doctrina que habéis aprendido, sea por palabra, o por carta nuestra. 2 Tesalonicenses 2:15
5) "Compra la verdad, y no la vendas" (Proverbios. 23:23), dice el sabio. Aferrarse a la verdad bíblica no es quedarse en el pasado; es situarse en la eternidad; porque la sana doctrina del Señor de los apóstoles no es antigua, es eterna. Es nuestra responsabilidad ante el Señor proclamar esta verdad a nuestra generación y a las venideras, a cualquier precio.
6) Nuestro tiempo es particularmente proclive a generar cada vez más doctrinas enfermizas,heréticas y apóstatas. No debe extrañarnos: "Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y doctrinas de demonios" (1 Ti. 4:1); "Porque vendrán tiempos cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias"
(2 Ti. 4:3).
Cual es nuestra actitud como ministros del santuario es defender y de mantener nuestra posición doctrinal en cuanto a todo el viento contrario que venga para hacernos salir de la verdad que hemos adquirido. Ya que cómo pentecostales que somos debemos mantener la doctrinas verdadera con el ardiente fuego del Espíritu Santo en nuestros corazones para hacer conocer la verdad. Que en esto 62 años cómo distrito del centro hemos sostenido el timón de la Sana doctrina con el fuego vivo del Espíritu Santo para que nuevas generaciones de ministros sigan nuestras pisadas y mantengan y sostenga en alto la sana doctrina Pentecostal.
Dios les Bendiga...
Revdo. Altino Guerra.
Pastor
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